La presentación de los actos en homenaje a Patrocinio de Biedma en Begíjar. | M. CuevasDe Begíjar al mundo
- El municipio jiennense busca reconocimiento público
- Ha iniciado una campaña usando como 'gancho' a la escritora Patrocinio de Biedma
- Fundó la revista 'Cádiz' y el orfanato conocido como 'La casa de los niños'
- La muerte de sus tres hijos fue determinante en su andadura literaria
- El Ayuntamiento quieren convertir en museo su casa natal y busca fondos
Úbeda y Baeza son paradas imprescindibles para cualquier viajero que recorra la provincia de Jaén; visitantes que, sin embargo, pasan casi siempre de largo cuando se trata de Begíjar, un municipio situado a apenas unos kilómetros del conjunto patrimonial.
"La iglesia, el torreón árabe, un callejero interesante, nuestro patrimonio acuífero...", enumera Santiago Vargas, director del Museo de Artes y Costumbres de la localidad, repleta de atractivos que, aunque "no están al mismo nivel que Baeza", son igualmente interesantes.
Entre esos atractivos, se encuentra sin duda el pasado literario de Begíjar, personificado en Patrocinio de Biedma, una figura que vivió en el siglo XIX y principios del XX y que en la actualidad es tan poco (re)conocida como la ciudad que la vio nacer.
La escritora De Biedma.
"No me da miedo compararla con Rosalía de Castro", comenta Vargas sobre esta "mujer guerrera" que se enfrentó a los cánones de una época poca propicia para las de su género con su pluma como arma.
Fue escritora, periodista y defensora de causas poco apropiadas para una fémina, posicionándose, por ejemplo, a favor de hacer navegable Guadalquivir entre Sevilla y Cádiz por considerarlo un motor de desarrollo. "Era muy llamativo, porque eso eran cosas de hombres", explica el begijense, quien destaca, además, cómo De Biedma intercedió entre la Reina Isabel II e Isaac Peral para facilitar la financiación del submarino.
Este dato da una pista bastante evidente de cuál era su posición: Patrocinio de Biedma pertenecía a una familia aristocrática que la colocaba en una situación privilegiada que no la alejó del dolor de la muerte de sus tres hijos, fruto de un matrimonio del que enviudó con veintipocos años.
La pérdida de los menores la condujo hasta la literatura, a través, en principio, de la poesía, para lugar escribir un buen puñado de novelas; la del marido la llevó a Cádiz, donde desarrolló casi toda su actividad, tanto cultural como social, creando la revista 'Cádiz' en 1877 y el orfanato 'El Patrocinio', conocido popularmente como 'la casa de los niños', en 1885.
"Allí pudo desarrollarse", señala el director del Museo, que desde hace unos días acoge un busto -obra del alfarero bailenense Francisco Sáez- con el que se ha querido homenajear a este personaje, cuya casa natal se mantiene en pie, a pesar de la burbuja inmobiliaria. "Hace cuatro años nos enteramos de que iban a derribarla para construir un bloque de pisos y un particular la compró", cuenta Vargas, mostrando su agradecimiento hacia José María Ruiz González, que fue quien libró la vivienda del derribo.
"El edificio en sí (una casa solariega del siglo XVIII) no tiene gran valor monumental", añade, incidiendo en la valía patrimonial de un lugar que se quiere convertir en casa-museo, como forma de poner en valor a la escritora y el pueblo. "Contamos con un legado bastante importante, además de familiares dispuestos a donar objetos personales", apunta.
El problema es económico. Convertir la casa en museo "tiene un coste que no podemos asumir y, de momento, no hemos encontrado financiación. Lo ideal sería que fuese un proyecto la administración local, pero por unas cosas o por otras, al final cuesta mucho", comenta el responsable del centro museístico de Begíjar.
La falta de respaldo, sin embargo, no es sólo económico, "es que tampoco hay respaldo de otro tipo", dice, explicando que, de momento, el Consistorio ha incoado un expediente para que la Junta declare y proteja la vivienda como Bien de Interés Cultural (BIC) de Andalucía. A pesar de ello, "seguiremos luchando hasta que nos escuchen", advierte.
"La iglesia, el torreón árabe, un callejero interesante, nuestro patrimonio acuífero...", enumera Santiago Vargas, director del Museo de Artes y Costumbres de la localidad, repleta de atractivos que, aunque "no están al mismo nivel que Baeza", son igualmente interesantes.
Entre esos atractivos, se encuentra sin duda el pasado literario de Begíjar, personificado en Patrocinio de Biedma, una figura que vivió en el siglo XIX y principios del XX y que en la actualidad es tan poco (re)conocida como la ciudad que la vio nacer.
La escritora De Biedma.Fue escritora, periodista y defensora de causas poco apropiadas para una fémina, posicionándose, por ejemplo, a favor de hacer navegable Guadalquivir entre Sevilla y Cádiz por considerarlo un motor de desarrollo. "Era muy llamativo, porque eso eran cosas de hombres", explica el begijense, quien destaca, además, cómo De Biedma intercedió entre la Reina Isabel II e Isaac Peral para facilitar la financiación del submarino.
Este dato da una pista bastante evidente de cuál era su posición: Patrocinio de Biedma pertenecía a una familia aristocrática que la colocaba en una situación privilegiada que no la alejó del dolor de la muerte de sus tres hijos, fruto de un matrimonio del que enviudó con veintipocos años.
La pérdida de los menores la condujo hasta la literatura, a través, en principio, de la poesía, para lugar escribir un buen puñado de novelas; la del marido la llevó a Cádiz, donde desarrolló casi toda su actividad, tanto cultural como social, creando la revista 'Cádiz' en 1877 y el orfanato 'El Patrocinio', conocido popularmente como 'la casa de los niños', en 1885.
"Allí pudo desarrollarse", señala el director del Museo, que desde hace unos días acoge un busto -obra del alfarero bailenense Francisco Sáez- con el que se ha querido homenajear a este personaje, cuya casa natal se mantiene en pie, a pesar de la burbuja inmobiliaria. "Hace cuatro años nos enteramos de que iban a derribarla para construir un bloque de pisos y un particular la compró", cuenta Vargas, mostrando su agradecimiento hacia José María Ruiz González, que fue quien libró la vivienda del derribo.
"El edificio en sí (una casa solariega del siglo XVIII) no tiene gran valor monumental", añade, incidiendo en la valía patrimonial de un lugar que se quiere convertir en casa-museo, como forma de poner en valor a la escritora y el pueblo. "Contamos con un legado bastante importante, además de familiares dispuestos a donar objetos personales", apunta.
El problema es económico. Convertir la casa en museo "tiene un coste que no podemos asumir y, de momento, no hemos encontrado financiación. Lo ideal sería que fuese un proyecto la administración local, pero por unas cosas o por otras, al final cuesta mucho", comenta el responsable del centro museístico de Begíjar.
La falta de respaldo, sin embargo, no es sólo económico, "es que tampoco hay respaldo de otro tipo", dice, explicando que, de momento, el Consistorio ha incoado un expediente para que la Junta declare y proteja la vivienda como Bien de Interés Cultural (BIC) de Andalucía. A pesar de ello, "seguiremos luchando hasta que nos escuchen", advierte.
Pinchar aquí para enlazar con la noticia en el diario EL MUNDO del 10 de mayo de 2012