VISTAS
Ahora. Desde aquí,
se puede ver la vida aún no cerrada
como en un abanico que se abriera
‒blancos, verdes, magentas, amarillos‒
a ciento veinte grados.
Desde aquí,
la luz va recorriendo este paisaje
y va dejando en sombra lo cruzado:
parcelas de algodón, de olivo duro,
de amapolas silvestres, de retama.
Todo ya en sombra. Todo.
Desde aquí,
los ojos ven el mar en el poniente:
estallido de espuma que despliega
su rosaleda púrpura en la orilla.
ROSA ROMOJARO
Cuando los pájaros, Madrid, Hiperión, 2010.